La NBA está tomando medidas decisivas para abordar las preocupaciones recientes relacionadas con el tanking y las apuestas, especialmente tras un escándalo que involucra a varias figuras prominentes de la liga. La liga está considerando cambios en sus políticas para abordar el tanking, que es la estrategia de perder partidos intencionadamente para obtener mejores posiciones en el draft. Los equipos deberán presentar informes de lesiones el día del partido entre las 11:00 y las 13:00 (hora estadounidense). Los informes de lesiones se actualizarán cada 15 minutos en la web oficial de la NBA, en lugar de cada hora, para evitar filtraciones que puedan influir en las apuestas.
Se planea mejorar el programa de educación sobre apuestas para jugadores, entrenadores y personal, así como adoptar medidas para protegerlos del acoso por parte de apostadores. La NBA busca mejorar su capacidad para investigar actividades de apuestas que parezcan sospechosas.
Se impondrán restricciones más estrictas en las apuestas especiales que se centran en el rendimiento estadístico de los jugadores y acciones concretas durante los partidos. Esto incluirá límites en las cantidades que se pueden apostar, restricciones a la baja, y una reducción en el número de jugadores que pueden ser apostados. Se eliminarán las apuestas que puedan decidirse en una sola jugada.
La liga se ha visto involucrada en un escándalo que relaciona a figuras como Chauncey Billups, Damon Jones y Terry Rozier con actividades de póker ilegales y amaños en las apuestas, lo que ha llevado a la NBA a actuar con rapidez para proteger la integridad del deporte. Adam Silver, el comisionado de la NBA, ha enfatizado la necesidad de tomar medidas firmes para evitar que la liga sea asociada con la mafia y otras actividades ilícitas.
